miércoles, 29 de junio de 2011

La importancia del cómo

(Publicada en L'Informatiu el 29 de junio de 2011. Ver aquí)


Esta es la sexta columna que escribo desde el debut como colaborador en L’Informatiu y es la quinta con referencias al 15M. ¿Qué es lo que me resulta tan atractivo de este movimiento? Sobre todo sus aciertos en el cómo. 

No digo que los qué no sean importantes. Muchas de sus propuestas me parecen acertadas. Considero un acierto estratégico, por ejemplo, su lucha contra los desahucios. Han identificado un elemento neurálgico. Evitar que una familia se quede sin techo por la voracidad de banqueros y rentistas cuando hay miles de viviendas vacías es algo que mucha gente entiende, sin necesidad de grandes conocimientos de macroeconomía. 

Pero por encima de los qué, como decía, me parecen claves sus aciertos en el cómo. Es importante lo que quieren, pero más importante todavía es el cómo hacen para conseguirlo. No vale de cualquier manera, y su manera es profundamente democrática. A pesar de los medios de comunicación y desinformación, persisten en buscar métodos radicalmente democráticos. Porque abrir la posibilidad de expresar la opinión a todo el que quiera hacerlo es radicalmente democrático. Como lo es privilegiar la reflexión, la discusión, el intercambio de ideas. 

Los medios de comunicación y desinformación insisten en sugerirles que elijan portavoces. ¿Cómo vais a hacer llegar vuestras propuestas a los políticos si no elegís interlocutores para que se las trasladen? les dicen. Y ellos persisten en su acierto de no elegir representantes. Si los políticos quieren conocer sus propuestas, sólo tienen que poner el oído. Ellos, mientras tanto siguen discutiendo, reflexionando, proponiendo, escuchándose, reconociéndose. Practicando la democracia, en definitiva. Una democracia deliberativa, participativa. Una democracia mucho más democrática que la que nos dejaron en herencia los padres (todos ellos machos, por cierto) de la Constitución.

Si la izquierda, las izquierdas, quieren realmente transformar el mundo en el que viven, en el que vivimos, esa es la vía por la que deberían transitar. Mirando hacia abajo (que para mirar hacia arriba ya está la derecha) y poniendo mucho cuidado en el qué pero sobre todo en el cómo. 

Porque pienso así es que me entristece profundamente vivir cómo organizaciones que se autodefinen como "ciudadanas y participativas" reproducen el cómo de los que miran hacia arriba. Porque no tiene sentido promover la participación hacia fuera, si no se promueve hacia dentro. Porque no se puede predicar la democracia y cortarla de raíz en el seno de tu propia organización. Porque no es compatible llenarse la boca de transformación social mientras dejas a más de la mitad de tu organización sin voz ni voto en el principal espacio de decisión. Por todo ello, te pido que te tomes unos minutos para decirle a la Junta Directiva de ACSUR Las Segovias que ese no es el camino. Puedes hacerlo aquí

No hay comentarios:

Publicar un comentario