miércoles, 28 de mayo de 2014

Reflexiones post electorales

El día después de las elecciones europeas fui uno más de los que, como relata Isaac Rosa, me puse a contar. Para ser preciso, fui de los que agarró la hoja de cálculo que da más juego. Tras una mirada rápida a los resultados en el conjunto del estado, me fui rápidamente al epígrafe "Comunitat Valenciana", la información que realmente me interesa. Y ya, ya se que los resultados de unas elecciones europeas no son extrapolables a unas elecciones autonómicas, pero de momento es la materia prima más fiable con la que contamos (visto lo visto, elección tras elección, los estudios demoscópicos han dejado de ser materia prima demasiado fiable).

Antes de compartir algunas reflexiones creo que conviene dejar claro mi punto de partida. Mi posicionamiento personal. De las seis primeras fuerzas políticas según los resultados electorales, me interesan fundamentalmente tres (y enumero por votos conseguidos): Esquerra Unida-Els Verds, Podemos y Compromís (en estas elecciones, con la marca Primavera Europea). Las tres me generan ciertas simpatías, en las tres encuentro aspectos que me parecen atractivos, en las tres conozco gentes que me parecen honestas. En las tres, también, hay elementos que no me agradan o que directamente me desagradan. 

El nombre y apellido del blog que escribo dan suficiente información como para entender porque no me interesan ni el Partido Popular ni UPyD. Respecto al PSPV, en el mapa de cuadrantes que conforman los ejes izquierda-derecha, arriba-abajo, se encuentra demasiado a la derecha y demasiado arriba para lo que mis planteamientos personales encuentran aceptable. No tengo dudas de que entre sus bases hay gente más a la izquierda y más abajo que lo que se encuentra la institucionalidad de su partido. Es su opción, no la mía.

Sentado el punto de partida, van esas reflexiones:

1. El Partido Popular ha conseguido el 29,09% de los votos emitidos. Teniendo en cuenta que la abstención alcanzó el 49,96%, eso significa que menos del 15% de las personas con derecho a voto decidieron confiar en el Partido Popular. Más de las que me gustaría, pero no son tantas.

2. Leída la prensa de los días posteriores y vista la cantidad de noticias que aluden a la búsqueda de posibles alianzas entre las tres fuerzas que me interesan, más el PSPV (han aparecido noticias con casi todos los cruces imaginables entre las cuatro), creo que es necesario recordar una vez más que en política electoral, dos más dos no necesariamente son cuatro. Es más, dos más dos probablemente no sumen cuatro. Muchos votantes de Compromís probablemente le retirarían su voto si se presentara en coalición con Esquerra Unida, y viceversa. Muchos votantes de Podemos no lo hubieran votado si se hubiera aliado antes de las elecciones con Esquerra Unida, ni siquiera con Pablo Iglesias como cabeza de cartel. Y muchos votantes de Esquerra Unida no hubieran perdonado una alianza pre electoral con Podemos, fuera quien fuera el cabeza de cartel. ¿Cuántos votantes de Compromís verían con buenos ojos una alianza con un partido promovido por unos señores de Madrid (y entiendo perfectamente estos recelos)? Cuidado entonces con las alianzas pre electorales, es probable que por separado se obtengan mejores resultados electorales que juntos, a pesar de los restos que se quedan en el camino gracias a la ley electoral que padecemos. Basta echar un vistazo a las puyas entre simpatizantes de unas y otras opciones que han circulado estos últimos días por las redes sociales.

3. La suma de los votos de las tres fuerzas mencionadas, las que me interesan, alcanzan el 26,53% de los votos emitidos. Casi cinco puntos por encima de los cosechados por el PSPV y sólo dos puntos y medio menos de los conseguidos por el PP. 

4. ¿Resulta impensable un escenario en las próximas elecciones autonómicas en el que el número de escaños conseguidos por estas tres fuerzas fuera superior al de los obtenidos por el PSPV y por el PP (por separado)? Puestos a ir un poco más allá… que fuera superior el conseguido por cualquiera de las dos fuerzas, hasta ahora mayoritarias, más el posible apoyo de UPyD. 

5. ¿Cómo reaccionarían PP y PSPV ante semejante escenario? ¿Buscarían una alianza para evitar que un candidato (personalmente preferiría una candidata) consensuada por las tres fuerzas mencionadas asumiera la Presidencia de la Generalitat?

Llegados a este punto, probablemente muchas de ustedes piensen que lo escrito, más que una sucesión de reflexiones es poco menos que el cuento de la lechera. Y probablemente tengan razón. Pero si alguna enseñanza "podemos" (valga la redundancia) obtener de estas últimas elecciones, es que a veces la lechera llega a la meta sin que el cántaro se rompa, y con cinco eurodiputados en el bolsillo.

Pero el cántaro no llegará sólo. Hará falta, sin duda, empujarlo con altas dosis de generosidad (especialmente entre las y los dirigentes de las tres fuerzas mencionadas), una buena cantidad de conversación pre electoral, y otra tanta post electoral, un buen chorro de transparencia (más conversaciones públicas que negociaciones de pasillo), y todo ello aderezado con importantes dosis de optimismo pegadizo y contagioso.

2 comentarios:

  1. Estuve toda la semana previa irritable y nervioso esperando el momento de "hacer la cuenta" que planteas. No me interesaba tanto saber si EUPV había podido llegar a los 7, o si la Campaña Electoral había exagerado su "factura" y habíamos "caído" a 5. Sabía que las encuestas solo eran fiables en la tendencia de voto decidido, y que "en Campaña" solo perderíamos algún decimal.

    La cuenta que quería hacer era la de "la franja -enorme- de crecimiento potencial" ¿donde se había quedado?... además de en su casa. Porque esa era otra "premisa", la abstención pese al interés del PP en conseguirlo, no iba a ser superior a la del 2009, no tendría sentido que "la clave interna" no sumase algún voto a la falsa "lejanía" de Bruselas.

    La Campaña de IU había quedado capada en lo esencial, presentarla como ocasión de plebiscito contra el bipartidismo que gobernaba las claves de la Política Europea y, aquí esta sometida a otros poderes contrarios a los del pueblo y corrompidas por esos poderes a los que sirve. Además de sometidas a unos "pactos de la transición" cuya ruptura es paso previo a cualquier política "democrática" de raíz.

    La 2ª clave de la Campaña, nuevas formas de hacer política, ruptura con la herencia recibida, transversalidad, presentar una unidad popular frente al poder, que motivase a expresar el rechazo en un voto que evidenciase el hartazgo con la "clase política" arañando abstención, un voto joven con otra “estética” de lo ético; no había sido posible expresarla por el peso de Andalucia+ Madid imponiendo a Wily de cabeza.

    Las negociaciones con una docena de fuerzas habían dejado a su "cúpula" exhausta y sin tejer lo principal, la conexión con mm.ss (que desde luego no podían ser "una de cal y otra de arena", Couso+CCOO); la irrupción de "podemos" (gente "de la casa") acababa con la poca imagen de "unidad" conseguida, podemos no querían negociar sino demostrar que "otra Campaña era posible" (curioso que el responsable de Acción Electoral de IU predijese el resultado de podemos -había trabajado en elecciones anteriores con el "equipo electoral" que hoy sustentaba podemos- además del de IU, y defendía -con muchas más- que Wily no podía encabezar, la lista estaba "bien" la lista pero no el orden. Fue apartado de "esta" Campaña UE). Con todo esto lo que quedaba era ver quién se llevaba el voto del Cambio de paradigma. Escaso (para las necesidades) ya que no había sido posible el "aquí esta Rodas, salta ahora".

    Así las cosas, quedaba comprobar como la "crisis de régimen" no se trasladaba al "populismo de derechas" como en la UE rica (Suecia, Dinamarca, Francia, UK,...), y si al de izquierdas "bolivariano", quedaba por ver el reparto de la "franja de crecimiento" (el casi "inevitable" por las condiciones objetivas) a las izquierdas que eran +q “plurales”. Hacer la cuenta que tu planteas, Javier, y sacar conclusiones provisionales e hipótesis de trabajo:

    Vamos bien y el fascismo no sube (aunque en pequeña medida se descare aun más). La franja de crecimiento que algunas encuestas preveían para Compromis por el "efecto simpatía a camiseta", se lo lleva finalmente Podemos, era un voto de joven cualificado en paro, no de nacionalista y oportunista en lo social. Podemos se lo ha llevado limpiamente, y aún suma algo más de la abstención y de la franja joven de IU.

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  2. La segunda cosa que temía era la difícil y trabajosa cuestión del día de después. Y aquí no falta de nada, lo va a ser y especialmente costosa. Podemos ha entrado a saco en el crecimiento "de burbuja" de Compromis (lo que se suele llamar voto prestado) y, también, en el crecimiento estructural de IU, el de renovación, el de una Refundación que se lanzo cuando solo era “posible” la "teorización" sin base real por la "calma chicha" de la calle. Significativamente IU ha recuperado el nivel de voto de "los tiempos de Anguita", el de la "izquierda consciente", pero sin sumar el nuevo “indignado” por ser de una generación cualificada sin lugar en el nuevo escenario de "servicios" y, mano de obra barata para las manufacturas que vayan sustituyendo a las chinas en el mercado UE; no ha llegado a penetrar con fuerza en el "objetivamente jodido" por el paro y los recortes, sin futuro y esperanza, que continua en la depresión postraumática de la abstención.

    Bién, estas eran las elecciones fáciles para experimentos, las de una Circunscripción única en que solo los restos penalizaban la falta de unidad, además de la incógnita del "efecto suma unitaria" en clima de esperanza combativa.Las siguientes no lo serán.

    En las siguientes elecciones esta la barrera del 5%, más los desastrosos efectos de las "circunscripciones pequeñas", un efecto barrera aún peor que supone superar barreras mucho mayores de acercarse al 20% en las circumscripciones de 5 diputados y al 30% en las de 3 diputadas/os,... o ir siéndo laminado en esas provincias. Y son esas elecciones las que más directa y visiblemente afectan, y en las que votará otro +20%, que el 25M no se ha pronunciado. Unos 4 millones de votos más que decisivos. Los mismos de este 25M entre las izquierdas a "la izquierda del PSOE", y que provienen del desgaste del #PPSOE ¿que harán? ¿Como ganarlos al Cambio?

    Por un lado es vital sumar candidaturas "unitarias" para superar las barreras insalvables de, por ejemplo, necesitar entre el 16% y el 20% en provincias como Castellón para un diputado al Congreso en Castellón, nadie a la izquierda del Psoe puede lograrlo, pero sus sumas superan al PSOE. Por otro lado, primero vendrán municipales y autonómicas, donde hay barreras, pero no tan insalvables, y donde las "biografías" cuentan y no es fácil hacer sumar el voto sino es dentro de movilizaciones unitarias en campañas concretas; elecciones locales en las que 2+2 no suman 4 y la suma puede llegar a restar. Y que además, en sus procesos gestantes y de ejecución generan climas de opinión y prejuicios (más difíciles de romper que el átomo) que lasque traerán procesos unitarios posteriores.
    Unidades difíciles, sin certezas, pero que resultan necesarias para las generales que son las últimas.

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